sábado, 4 de febrero de 2012

Los Sin Rostro


Estaban tan acostumbrados a llevar máscaras que sus personalidades se adaptaron a ellas, la tez se engarzaba a la fría base de hierro y sus estados de ánimo eran evidentes. Formaban una familia numerosa y bastante puntillosa, nunca les gustó relacionarse, la muchedumbre los miraba con recelo y aprensión cuando estos dirigían sus ojos hacia los mismos. Pasaban los años en soledad, se exhibían en bailes de máscaras sin máscaras, eran conocidos en Venecia como la familia 'Piel de hierro'. Un buen día no despertaron, los Sin Rostro murieron, no de viejos ni por enfermedad alguna, no murieron por asesinato ni por accidente, simplemente los mató el óxido.