Torre infiel

Paseábamos lejos del rencor, por la orilla, a la pata coja cruzando pasos de cebra pisando las lineas blancas pensando que si tocamos el color gris de la carretera nos volveríamos de color blanco y negro, recordando recuerdos que olvidábamos a corto plazo, pensando en "el que no dirán", jugando al billar con manzanas y tu me pedías que te cantara "besos a nadie" en la oreja. Íbamos de la mano por las rocas, tan agarrados como una pelea de pulpos, y juntos devolvíamos la arena de los relojes a sus playas. Soy infiel al pasado, lo siento, el futuro lleva la falda mas corta.